Manhattan, el gran clásico de los cócteles

Entre rumores y leyendas se sirve el origen del Manhattan, uno de los cócteles más conocidos de la mixología, y quizá uno de los que más se disfruta porque encuentra un buen balance entre lo amargo y lo dulce. Desde hace muchos años ya no solo es un distrito de los cinco que conforman Nueva York; situado en el corazón de la gran manzana, sino que desde hace ya algún tiempo encandila paladares alrededor de bares en el mundo. La receta de este cóctel bien puede adaptarse en función de las preferencias de dulzor o sequedad. Sus ingredientes son pocos y bastantes simples, además de muy fáciles de conseguir. No obstante, no olvides que es una bebida para adultos por su alto contenido de alcohol.

Historia del Manhattan

La primera de muchas de las historias que envuelven a este cóctel se remonta a principios del año 1870, en el Manhattan Club de Nueva York, cuando una noche, Jennie Jerome, madre de Winston Churchill, organizó una fiesta en honor del candidato presidencial Samuel J. Tilden. Y le pidió al barman del club que crease un cóctel especial para la gala.

Sin embargo, algunos aseguran que aunque el cóctel si fue creado en el Manhattan Club, Lady Randolph Churchill no tenía nada que ver con el banquete, ya que ella estaría en Inglaterra dando a luz a su hijo.

Otros rumores aseguran que el cóctel Manhattan data alrededor de 1860, cuando un barman apellidado Black en un bar de la calle Broadway cerca de Houston, creó y bautizó este cóctel. Hay muchas más historias acerca de la creación de este gran clásico, pero sea cual sea la verdadera historia, lo importante es que hoy podemos disfrutarlo.

Ya para las décadas de los años 30 y 40 con el esplendor del cine de Hollywood, se convirtió en la bebida preferida por los caballeros, famosa y glamurosa, al ver en las películas a algunos de los actores más importantes de la época bebiéndose un cóctel Manhattan, en actuaciones de mafiosos, ejecutivos o casanovas.

Actualmente el Manhattan, es uno de los cócteles avalados por la IBA, Asociación Internacional de Bartenders, en la clasificación oficial de “the Unforgettables”.

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Ingredientes

No podemos pasar sin explicar la receta mas clásica de este cóctel de whiskey. Originalmente se utilizaba Whisky de centeno porque era el que se consumía en Nueva York, es un cóctel que se suele tomar en el aperitivo pero es ideal para cualquier momento del día, aunque tiene un nivel alcohólico potente. Por lo que se recomienda beberlo despacio y disfrutarlo. A medida que se fue extendiendo por Estados Unidos, en muchos lugares se cambió el whisky de centeno por Bourbon, el Whiskey americano con base de maíz, el más popular en el país. Por esta razón, podemos encontrar variedad en su ingrediente principal.

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Para preparar el clásico Manhattan necesitarás:

  • 2 onzas de whisky o bourbon
  • ½ onza de vermut rosso
  • 2 ó 3 golpes de bitter
  • Una cereza al marrasquino para decorar.

Preparación

Antes de prepararlo, recuerda que los ingredientes sean de calidad y midas bien las cantidades.

  1. En una coctelera añade varios hielos gruesos, agrega el whisky o bourbon, el Martini rosso y un par de gotas de bitter.
  2. Una vez que se tienen todos los ingredientes en el vaso, con una cuchara remueve bien hasta que se combine todo y el tono se acerque al color fresa.
  3. Después de unos segundos agitando, desecha los hielos y el agua de la copa y sirve la mezcla pasando por un colador, hasta llenar tres cuartas partes de la copa. La copa debe estar previamente enfriada.
  4. Para finalizar, añade la cereza. También se puede decorar con piel de naranja.

Por el tipo de copas en el que se sirve, el Manhattan es un trago corto y sofisticado como su origen. Elegir un Manhattan hoy sigue siendo sinónimo de buen gusto, de clase y distinción.

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Variantes del Manhattan

Al ser un cóctel tan sencillo, ha servido de inspiración para crear otros combinados. Además de que es una bebida con la que a los barman les gusta innovar. Esto ha provocado que existan muchas variantes. Si ya probaste el Manhattan cóctel, no puedes dejar de probar algunas versiones que pueden ir desde el toque más seco a lo más dulce. Entre algunas de sus variantes tenemos:

Dry Manhattan: Una opción más seca que se prepara con Vermut seco. Se sirve en copa Martini o vaso de Whisky y
se adorna con cáscara de limón o naranja.

Latin Manhattan: Una mezcla de partes iguales de ron blanco, vermouth dulce y vermouth seco, además de un chorrito de zumo de cereza. Se decora con una cereza al marasquino.

Harvard Manhattan: Sustituye el whisky por brandy y añade Vermú rojo y unas gotas de Angostura.

Chilean Manhattan: Hecho con Pisco (aguardiente de uvas procedente de Chile y Perú).

Sweet Manhattan: Mantiene la receta original pero se le añade licor de Marrasquino.

Manhattan Perfecto: combina la misma proporción de vermouth rojo y seco (1/2 onza de cada uno).

Os animamos a probar este maravilloso combinado que sin duda no os dejará indiferentes.

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